miércoles, 4 de abril de 2012
Para tí.
Y hoy descubro que realmente se puede temblar de rabia, que realmente se puede llegar a odiar con todo tu corazón, que realmente hay gente falsa, y que por mucho que te digan confia en mi, te traicionaran. He aprendido que realmente no debo contar lo que siento ni lo que pasa, y que no se puede tener fe ni esperanza. En nada.
Me sigo guardando todo lo que quiero decirte, pero ya me voy quedando sin espacio, y llegará un momento que todo explote. Y entonces, serás tu quien se trague esta vez las lágrimas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario